Después de la la fiebre por la alimentación vegetal y los ingredientes ecológicos, parecía imposible que algo así pudiera volver a ser tendencia, pero sí: el cerdo vuelve a estar de moda en la capital. Los embutidos ibéricos son los excepcionales protagonistas de nuevas aperturas, y una de las últimas es Marcelino, vinos y ultraporcinos (Caracas, 1 <M> Alonso Martínez), en el barrio de Chamberí. Una tasca dedicada por entero a los vinos seleccionados y a las chacinas procedentes única y exclusivamente del cerdo ibérico.

Por la estética recuerda a un local ultramarinos de toda la vida, a caballo entre una charcutería (báscula de las de antes, tablas de cortar fiambres y embutidos colgados desde el techo) y una taberna. Con la diferencia de que aquí no hay nada más que cerdo y productos derivados -de ahí la palabra, ‘ultraporcinos’-. Sus jóvenes emprendedores los seleccionan de entre los mejores de toda España, desde Extremadura a Andalucía, pasando por Castilla y León, Cataluña, Islas Baleares

Los presentan al estilo tradicional: tablas de embutidos combinados y ya cortados, con sobrasada, salchichón, lomo, chorizo, butifarra… y algún que otro queso. Y aunque tienen una carta con propuestas cerradas, a las que han dedicado nombres tan actuales como ‘Independiente 155’ (con butifarra blanca y negra, somalla y salchichón), también se pueden confeccionar al gusto, eligiendo entre los diferentes tamaños de tablas (80, 200, 400 gramos…). Para la hora del aperitivo se reservan sorpresas como sus codiciados torreznos, pero solo durante los jueves.

De la carta de vinos se encarga la tienda especializada Pickleton & Wine, con espacio propio en el gastronómico Mercado de San Miguel. Al igual que los embutidos, las referencias de vinos han seleccionadas de entre todas las denominaciones de origen de España y del extranjero, donde sobresale algún champagne, para maridar con cada una de las propuestas de su carta. Un sitio donde, sin duda, no se puede decir aquello de que ‘la carne es débil’. Sino todo lo contrario.

Precio de las tablas: desde 14,50€. Más información en la web de Marcelino, vinos y ultraporcinos.

* Fotos: Alfonso Ondarroa