A las 4 de la mañana comienza a calentar los motores el equipo del obrador de pan de Cientotreintaº. Sus panes de masa con productos de calidad y un proceso de creación artesanal descansan desde primera hora de la mañana en el mostrador de esta panadería gourmet ubicada en Chamberí. Pero junto al olor del pan recién hecho se mezcla otro igual de especial: el de café. Y no cualquier café. Cientotreintaº, como reza su cartel de entrada, es una panadería y también un tostadero de café de especialidad. Tampoco faltan los dulces caseros en su barra de degustación.

Cientotreinta Grados, una panadería gourmet con café de especialidad

Los responsables de este obrador son los hermanos Miragoli. Aunque sin tradición panadera directa, la vida les llevó a los dos a formarse en el sector. Alberto Miragoli se introdujo en el mundo de la panadería y la repostería formándose en una de las mejores escuelas de panadería del mundo: el San Francisco Baking Institute. Su hermano Guido también se ha especializado en hostelería y ha aprendido el arte del café de especialidad. ¿El resultado? Una panadería gourmet donde comprar pan artesanal y ecológico, pastelería delicatessen de fuerte inspiración francesa y disfrutar de un café de especialidad tostado en el propio local.

PAN 100% ARTESANAL Y ECOLÓGICO

Todos los productos se hacen en el mismo local. Tras el cristal que separa el espacio de compra del de trabajo se ve al equipo preparando los cuatro tipos de hogazas – de masa madre con harina blanca de trigo, integral, de sésamo y de lino y avena-, las baguettes y las chapatas que forman la lista de productos de esta panadería gourmet. En fin de semana amplían la oferta con panes especiales, como el de aceitunas.

Cientotreinta Grados, una panadería gourmet con café de especialidad

La filosofía de Cientotreintaº es mantener la tradición, basándose en fermentaciones muy largas y calculadas que favorecen la aparición de levaduras naturales. Además, las harinas son molidas a la piedra, al estilo tradicional, que mantienen todos los nutrientes del alimento asegurando una mejor digestión. También buscan ofrecer el mejor producto. Algunos de estos productos provienen de España, como el centeno para sus panes o los huevos ecológicos y la fruta que utilizan para sus postres. El resto es importado: mantequilla francesa, cardamomo inglés o harinas italianas.

BARRA DEGUSTACIÓN

En la planta baja de Cientotreintaº las manos expertas reposteras trabajan todo el día para ofrecer un listado de delicias 100% natural. Hay repostería clásica francesa como el cruasán o las napolitanas de chocolate; pero también delicias internacionales como el Bretón Kouign Amamm, la americana Cheesecake o el Morning Bunn (con canela y cardamomo).

Cientotreinta Grados, una panadería gourmet con café de especialidad

Y junto al dulce no puede faltar un café. Tanto para tomar en la barra (con capacidad para unas 6 personas) como para llevar, en el mostrador reposa una flagrante máquina de café expreso en la que trabajan baristas expertos para conseguir la mejor taza. También en este producto la calidad y el proceso artesanal está presente. Los granos de café provienen de pequeños cultivos sostenibles y naturales, seleccionados por el propio Guido, que se encarga él mismo de molerlos y tostarlos. El resultado es un café de especialidad con tostado ligero y natural con un sabor y matices únicos. Y si se gusta, con leche fresca como aderezo.

DIRECCIÓN: Fernando El Católico, 17 (<M> Quevedo). HORARIO: De M-V, de 8 a 21h. S de 09 a 16h y D, de 09 a 15h. Lunes cerrado. PRECIO: Hogazas 5-6€. Baguette 2€. Dulces 1,60€-3,50€. Café 1,60€-2,80€.